Ahora que el tráfico aéreo en el país se ha abierto nuevamente, cada vez más viajeros aprovechan para volar a diferentes ciudades del país, ya sea para vacacionar, por trabajo o para visitar a algún familiar. Sin importar la razón, lo cierto es que los protocolos de seguridad dentro de los aeropuertos, han cambiado mucho desde que empezó la pandemia.
Pero, aunque el tiempo dentro del aeropuerto es un poco más prolongado, y las filas un poco más largas, todas estas medidas están pensadas para garantizar nuestra seguridad abordo.
Pero, ¿cómo son los vuelos después de la cuarentena? Pensando en aquellos que pretenden viajar pronto y no saben qué esperar de este viaje, el equipo de Viajala abordó un avión para viajar de Medellín a Bogotá, para contarte cómo es volar en la pandemia y cómo puedes minimizar los riesgos de contagio. Así que a continuación te contamos todos los detalles.
1- ¿Las sillas de los aviones están totalmente ocupadas?
Sí. Todos los asientos del avión están a la venta, por lo que es muy probable que, en caso de que haya una gran demanda de tiquetes, el avión esté totalmente lleno. Sin embargo, esto no debe ser un motivo de preocupación, ya que el aire dentro de las cabinas circula constantemente y, desde que estés portando tu mascarilla y uses gel antibacterial, todo estará bien.
Si necesitas usar el baño durante el vuelo, lo ideal es que evites las filas y desinfectes primero lo que vas a utilizar.
2- ¿Y los aeropuertos, están demasiado llenos?
En general no, ya que únicamente pueden ingresar los pasajeros que hayan realizado el web check in y los que tengan confirmación de la compra a la mano. Además, sólo se puede ingresar al aeropuerto dentro del rango de tiempo relacionado al vuelo, es decir, máximo 2 horas antes de la salida programada del vuelo. Si llegas con más tiempo de anticipación, el personal del aeropuerto no te permitirá el ingreso.
3- ¿Cómo funciona el proceso de facturación y embarque?
El proceso es similar a como lo hacíamos antes, con algunas diferencias significativas.
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Como lo dijimos antes, sólo puedes ingresar máximo 2 horas antes de la salida de tu vuelo, si más temprano no te van a dejar entrar al aeropuerto. Es importante respetar esta normal, ya que esto evita que se generen aglomeraciones.
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El proceso para facturar el equipaje es el mismo, solo es importante respetar la distancia en la fila. Para ello, el aeropuerto indica los límites de los espacios con marcaciones en el piso, tanto para hacer el check-in como en las puertas de embarque.
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Durante todo el tiempo que estés en el aeropuerto, debes portar tapabocas y usar gel antibacterial.
4- ¿Cuáles son los procedimientos de seguridad de las aerolíneas y del aeropuerto?
Aparte de los protocolos de bioseguridad, como el uso obligatorio de gel antibacterial y de tapabocas, las aerolíneas han implementado otras medidas para garantizar que el viaje sea lo más seguro posible. Algunas de estas medidas son:
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Ningún contacto con el personal de la aerolínea o del aeropuerto, por lo que al momento de embarcar no tienes que entregar tu cédula sino mostrarla a través de un cristal.
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Distancia de al menos dos metros en las filas para facturar equipaje, para ingresar al avión y en los asientos dentro de la sala de abordaje.
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El equipaje de mano no se guarda en los compartimientos de arriba, sino que se ubica debajo del asiento de enfrente, a menos que tengas maleta de ruedas, puede ir arriba.
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El ingreso al avión se hace por filas.
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5- ¿Es posible prevenir el contagio en un viaje?
Cuando se trata del COVID-19, no existe una medida de prevención 100% garantizada para cualquier persona que entre en contacto con el mundo exterior, ya sea directa o indirectamente, es decir, salir de casa o recibir visitas. Sin embargo, es posible minimizar los riesgos de contagio con responsabilidad, paciencia y utilizando el equipo adecuado.
Las personas que forman parte del grupo de riesgo, por ejemplo, pueden utilizar equipos más completos, como protectores faciales y guantes.
Minimizar el riesgo de contagio también depende del sentido común de los viajeros y cada uno debe hacer su parte. Por ejemplo, si estás sentado junto a alguien sin tapabocas, puedes hacer tu parte y pedirle amablemente a la persona que se lo ponga.