Carnaval, esa época del año en la que los días tienen sabor a fiesta, color y nuevos amigos en cada rincón, es la oportunidad perfecta para tomarse unas vacaciones y visitar un destino desconocido. 

Si bien en casi cada país se realiza alguna actividad por estas fechas, ya sea a nivel nacional o local, hay lugares donde la alegría y la originalidad parecen no tener fin y cada año resulta ser mejor que el anterior. 

1. Barranquilla

Año a año crece en Colombia el orgullo de contar con un carnaval que ha sido declarado Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad y que cada vez es más reconocido en el mundo, gracias a los testimonios de miles de turistas que una vez que lo disfrutan, siempre quieren volver.  
 
 
El Carnaval de Barranquilla, que al igual que la mayoría en América Latina se origina de un sincretismo entre las costumbres religiosas y las de los esclavos africanos, inicia con la Lectura del Bando a cargo de la Reina, quien entre bromas y rimas da el permiso para que se instalen la alegría, la rumba y el alboroto durante varios días. El evento de apertura es la Batalla de Flores, un desfile con más de un siglo de tradición en el que fascinantes carrozas y las mejores comparsas recorren las principales calles de la ciudad bajo el caluroso sol que la caracteriza. Otros grandes desfiles se realizan durante los dos días siguientes y en la tarde del lunes inicia el clásico Festival de Orquestas y Acordeones, que enciende la fiesta hasta la mañana siguiente. 
 
Finalmente, el martes se realiza una especie de ritual simbólico de cierre del carnaval: el entierro de Joselito, el espíritu parrandero que año a año resucita el sábado y muere a los tres días, cansado y enguayabado pero lleno de alegría. 

2. Recife

El famoso Carnaval de Recife y Olinda, aunque algunas veces opacado por los de otras grandes ciudades de Brasil, se diferencia del resto al mantener vivas algunas de las principales tradiciones de esta celebración histórica, como la música típica del estado de Pernambuco. 
 
 
Si bien desde ya se están realizando eventos previos que para muchos de nosotros parecerían un carnaval en plena celebración, la inauguración será el viernes 13 de febrero con una programación impresionante de actividades artísticas abiertas al público. El día después se produce un acontecimiento espectacular, cuando la comparsa de carnaval más grande del mundo, llamada Galo da Madrugada, llena las calles del centro de Recife con sus más de dos millones de integrantes. Además, como parte del área metropolitana de Recife se encuentra la ciudad de Olinda, una pequeña localidad histórica donde el carnaval es representado entre calles coloniales y la música y sus intérpretes son menos dados al show y más apegados a la tradición. 

3. Venecia

A diferencia del resto de carnavales en el mundo, el de Venecia nació y se mantiene como una oportunidad en la que miles de personas disfrutan de majestuosas celebraciones, escondiendo su identidad bajo elaborados y lujosos disfraces. 
 
Foto: Todo Humor
 
Las famosas máscaras que actualmente son el símbolo de esta celebración, eran usadas hace varios siglos por la aristocracia italiana y europea en general, que llegaba hasta Venecia para disfrutar de unos días de fiesta, descontrol y anonimato, entrando en contacto con el pueblo y sus tradiciones. En estos días la costumbre de llevar máscaras se mantiene para todos quienes celebran el carnaval, e incluso algunos optan por utilizar los disfraces que recuerdan las ostentosas formas de vestir de la época. En esta ciudad la celebración dura 10 días, aunque los eventos previos inician con la Fiesta sobre el Agua, que este año será el 31 de enero, el Concurso de Disfraces Enmascarado y la Fiesta de las Marías en la Plaza de San Marcos el 7 de febrero, entre otros. 
 
Durante los cuatro días del carnaval, las calles se llenan de incógnitos y las fiestas privadas son uno de los principales atractivos, muchas de ellas realizadas en palacios o casas históricas, lo que le da una atmósfera surreal a esta celebración. 

4. Montevideo

Uruguay se precia de tener el carnaval más largo del mundo, con celebraciones que duran más de un mes y combinan magistralmente las costumbres festivas europeas con las africanas. 
 
 
El más grande evento nacional inicia a mediados de enero y termina a finales de febrero, y la capital del país es uno de los mejores sitios para vivirlo de cerca. Una de las principales características de este época es la casi omnipresencia de las murgas, grupos artísticos de unas 15 personas que mezclan alegremente la música, el coro y el teatro, para interpretar ritmos afrouruguayos, que incluso compiten en el Concurso Oficial de Agrupaciones de Carnaval. Durante su visita aproveche para conocer el Museo del Carnaval, sea parte del Desfile de Llamadas donde todo gira en torno a los tambores y el candombe, y si gusta del teatro, no se pierda las incontables obras que se presentan en diversos escenarios llamados “tablados” alrededor de la ciudad. 

5. Oruro

Aunque la fama de Bolivia no está precisamente relacionada con la fiesta, el Carnaval de Oruro se está convirtiendo en el sueño de muchos viajeros gracias a la belleza de sus actividades y al sincretismo de tradiciones que tienen más de 1.000 años de existencia.   
 
 
Esta celebración ha sido reconocida como Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad y se remonta a la época pre incaica, en la cual los pueblos de los Andes visitaban la zona para adorar a sus dioses. Posteriormente, los Incas y los españoles fueron modificando las tradiciones y en la actualidad esta celebración mantiene una identidad andina que no se ve en ningún otro carnaval. Las celebraciones en Oruro tienen una homenajeada especial: la Virgen del Socavón, también Reina del Folclore de Bolivia, que protege a los mineros y en cuyo honor se realiza una masiva peregrinación tres días antes del sábado. Durante los cuatro días que duran las fiestas, más de 50 comparsas llenan las calles de música y bailes de diferentes partes del país, y miles de turistas nacionales e internacionales disfrutan de este evento único en el mundo.